Todo proceso productivo requiere de máquinas y equipos, y para que éstos funcionen se necesitan instalaciones eléctricas capaces de suministrar la energía eléctrica. Una buena instalación es aquella que contempla un adecuado dimensionamiento de conductores, equipos de mando, control y protección para su operación, y por supuesto, contemplando la seguridad. El curso toma en cuenta las técnicas, herramientas y recomendaciones acorde a las normas nacionales e internacionales para las instalaciones eléctricas comerciales.
Estudiantes de ingeniería, técnicos, ingenieros, asesores técnicos comerciales y personal dedicado a las instalaciones y mantenimiento eléctrico.